Embajada de Panamá en Chile bajo lupa: ¿destapando la olla diplomática?
El Ministerio de Relaciones Exteriores ha decidido sacudir la alfombra en la Embajada de Panamá en Chile, ordenando una auditoría sobre la gestión del exnotario Mario Velásquez Chizmar, quien dirigió la misión durante el gobierno anterior. Para esta noble causa, las abanderadas de la justicia contable, Leibhys Vásquez y María Rivera, entrarán en acción la próxima semana con un calendario perfectamente sincronizado: justo a tiempo para terminar antes de que comiencen las fiestas patrias. Mientras tanto, las actuales autoridades han otorgado los laureles diplomáticos a Mónica Viggiano como embajadora y cónsul, casualmente esposa de Roberto Arango Chiari. Porque, claro, ¿quién dijo que el amor no puede encontrar su nicho entre trámites consulares y cócteles oficiales? Lo que sigue siendo un misterio digno de la Reportera del Crimen es si esta cruzada auditora será exclusiva para la embajada chilena o si alguna otra sede diplomática también recibirá su ‘visita sorpresa’. Embajada en Chile: donde el romance florece y las auditorías también.
Por las buenas o por decreto: ocupación exprés para la Línea 3 del Metro
En un movimiento que rara vez sorprende —porque cuando se trata de construir, la diplomacia tiene sus límites—, el Ministerio de la Presidencia ordenó la ocupación inmediata de una franja de terreno en Vista Alegre, Arraiján. La razón: la Línea 3 del Metro debe avanzar, y el acuerdo con el dueño simplemente no estaba fluyendo. Así que, en nombre de la ‘utilidad pública e interés social urgente’, las formalidades quedaron en segundo plano. La ocupación temporal, disfrazada de alquiler por 60 días, permitirá el izaje de vigas y la colocación del techo de la estación. Porque si algo sabemos de la burocracia es que cuando dice ‘temporal’, podría significar cualquier cosa menos eso. ¿Será que al propietario le mandarán también una placa conmemorativa o un par de boletos de cortesía para el día de la inauguración? El decreto lleva la firma estelar del presidente José Raúl Mulino y su ministro de la Presidencia, una especie de ‘con cariño, pero sin permiso’. Y si el dueño del terreno aún tiene alguna queja… bueno, que se siente a esperar con paciencia de monje. Porque una vez que las vigas se levantan, ni el techo ni los decretos bajan.
La vida después del poder: placas, calor y mucha paciencia
Yazmín Colón de Cortizo, quien fuera primera dama hasta hace pocos meses, quizá nunca había tenido que preocuparse por cosas tan mundanas como hacer filas o llenar formularios. Pero ahora, con su esposo Laurentino fuera del poder, la realidad la había alcanzado con la fuerza de un camión sin frenos. Este miércoles fue vista en las instalaciones municipales destinadas al trámite de placas y traspaso vehicular. A su alrededor, un grupo de personas sudaba y se quejaba mientras esperaba su turno. Con su tradicional elegancia, tan sutil como poderosa, Yazmín lucía una blusa caqui, jeans blancos y cómodas zapatillas. Cada movimiento, cada gesto, hablaba de una vida rica en experiencias y buen gusto. En el fondo se escuchaba una pegajosa música de salsa de la orquesta La Terrífica, que un parroquiano tarareaba casi sin desafinar: «Bueno señores, estos son casos de la vida real… cómo da vueltas la vida, cómo da vueltas la vida, cómo camina el reloj… cómo da vueltas el mundo, cómo pasan los segundos, cómo la gente cambió…»
¿Abrir para cerrar? El dilema de la economía panameña: entre números rojos y esperanzas verdes
El panorama económico para 2025 parece sacado de una tragicomedia: el Canal de Panamá generará ingresos… pero ni siquiera lo suficiente para pagar los intereses de la deuda. Así lo advierte el informe “Los Números de Panamá”, cortesía del economista Aristides Hernández y el empresario Rafael Carles, quienes nos traen una verdad incómoda: los fondos canaleros van directo al Tesoro, pero el agujero es tan grande que apenas taparán las goteras. Para que no todo suene tan deprimente, los autores estiman que la economía panameña crecerá un modesto 2.5% en 2024, a pesar del cierre de la mina de cobre y la crisis hídrica que encogió el tráfico de barcos en la vía acuática. Claro, si no fuera por esos ‘pequeños inconvenientes’, el PIB hubiera alcanzado más del 7 por ciento. Así queda la gran encrucijada para el gobierno de Mulino: ¿Qué hacemos ahora? ¿Abrimos más operaciones para cerrar menos deudas? O tal vez simplemente abrimos los brazos, cerramos los ojos y nos preparamos para el golpe financiero. Total, cuando el interés de la deuda te ahoga, lo único que queda es aprender a flotar… o, en este caso, navegar a la deriva.
Beneplácito sí, decreto de nombramiento aún no: el limbo diplomático de Abraham Martínez
Abraham Martínez se encuentra en una especie de limbo diplomático. El exdiputado continúa tejiendo sueños de embajador de Panamá en México. Sus aspiraciones son respaldadas por una misiva del gobierno mexicano en la que se comunica al Ministerio de Relaciones Exteriores de Panamá que le ha concedido el beneplácito para reemplazar a Alfredo Oranges. Sin embargo, Martínez no tiene en su poder el decreto en que el presidente José Raúl Mulino, en conjunto con el canciller Javier Martínez-Acha, formaliza su nombramiento, requisito indispensable para su correspondiente toma de posesión. Pese a este ‘mínimo detalle’ que le sigue siendo tan esquivo como un unicornio en el desierto, Abraham Martínez tiene previsto —si no hay mayores sobresaltos, como espera— partir hacia la tierra de la tortilla y el tequila no en una fecha cualquiera: el 6 de enero de 2025, ni más ni menos, el Día de Reyes.